Una de las costumbres más bonitas de Navidad que se han mantenido a lo largo de la historia es la de los mercadillos. Nació en el siglo 14 en los países de lengua alemana y se fue extendiendo por las distintas ciudades, hasta que ahora los mercadillos han convertido en una ruta casi obligatoria una vez empieza diciembre.

Italia puede presumir de tener una de las rutas más bonitas de mercadillos navideños, aquí te dejamos alguno de ellos:

Bolzano 

Ubicado en la zona de Trentino-Alto Adigio, es el mercadillo navideño por antonomasia en Italia. En la plaza Walter se sitúan todas las casetas de madera repletas de productos típicos navideños, que junto a las luces, abetos y decoraciones le dan a la ciudad ese aire de cuento de Navidad. No puedes pasar sin probar el vin brulè – vino caliente aromatizado – acompañado de un pretzel de mostaza o un strudel de manzana y miel

Nápoles 

Nápoles es sinónimo de belenes. Fue en esta ciudad donde nació esta larguísima tradición navideña. Seguro que aquí encuentras la figurita perfecta para completar el belén, pero no solo en Navidad. La Vía de San Gregorio Armeno cuenta los 365 días del año con tiendas con figuras originales y una gran variedad de dulces, como los babá o los struffoli.

Bolonia

Bolonia acoge 2 de los mercadillos navideños más antiguos de Italia. La Feria de Santa Lucía situada en el Portico de Santa María dei Servi y la Feria di Natale en el corazón de la ciudad son el lugar perfecto para encontrar figuras para el Belén, regalos, decoraciones para el árbol y la casa.

Además, es el paraíso de dulces navideños como el turrón o de otros dulces como el algodón de azúcar.

Govone

El tercer mercadillo más visitado de Italia. Este mercadillo de la zona del Piamonte, destaca por estar situado junto al castillo del siglo XVIII y el parque que lo rodea. Este lugar mágico rodeado de abetos y un paisaje nevado te traslada a una auténtica postal de Navidad.

 Ofrece el plan navideño perfecto, paseando entre los puestos o probando el vino y los dulces típicos como el chocolate caliente, el turrón o las trufas.

Merano

Quizás te suene esta ciudad por la Emperatriz Sissi. Las aguas saludables de sus termas y su clima templado hicieron que fuera la elegida para pasar largas temporadas por la Emperatriz de Austria.

Sin duda el lugar perfecto para descubrir la esencia de la navidad italiana y bañarse en una piscina exterior a 28 grados. Si tienes suerte y nieva la experiencia será única.

Levico

Este mercadillo se sitúa en el Parco Secolare degli Asburgo, repartiendo los puestos por los senderos del parque. Distintos muñecos tallados en madera se reparten por todo el recorrido.

Después del atardecer el ambiente es mucho más navideño, pero también es perfecto para pasar el día con los más pequeños ya que cuenta con actividades y hay una pequeña granja con animales.

Si no puedes viajar a Italia siempre está la opción de ir a visitar el mercadillo de la Plaza Mayor y después pasarte por Just Italia, te aseguramos que sentirás que has viajado al país de la bota.

Además si pruebas alguno de nuestros productos navideños como el panettone, el pandoro o los cioccolato Maglio, el día navideño será redondo.