Italia, al igual que España, es un país de costumbres, sobre todo en Navidad. Pero, ¿tan diferentes son estas culturas en la época más emblemática del año? ¡Para nada! Teniendo en cuenta que esta celebración religiosa parte del cristianismo romano, era de esperar que ambas tradiciones compartieran similitudes. De hecho, son tan parecidas que coinciden hasta en la decoración.
Fechas importantes
El día 8 de diciembre es el preámbulo de la Navidad en Italia. Ese día se celebra la Inmaculada Concepción, el último festivo antes del periodo de vacaciones. Muchas familias aprovechan que los más pequeños del hogar no tienen clase ese día para decorar la casa juntos.
Con el hogar ya ambientado, las dos semanas hasta que llegan las vacaciones se pasan rápido. Como también ocurre en España, los días 24 y 25 se suelen pasar junto a los seres queridos. Hay quienes optan por reunirse en Nochebuena para disfrutar del famoso “cenone navideño”, y familias que esperan a la mañana siguiente para festejar la Natale.
La Navidad concluye el 6 de enero, coincidiendo con el día de Reyes. Pero, a diferencia de la costumbre española, los niños italianos no esperan a Melchor, Gaspar y Baltasar. En la tradición del país de la bota, los regalos y dulces los trae la “Befana”, una viejecita con zapatos desgastados que vuela sobre una escoba y se cuela en las casas por las chimeneas.
Aunque su nombre procede de la festividad que representa, la Epifanía, este personaje tiene orígenes paganos. La lectura que tiene la intrusión de la Befana en esta fiesta es que viene a llevarse la Navidad. Aún así, es el momento preferido de los más pequeños, ya que viene cargada de regalos, y bueno, también de carbón para los que no han sido buenos durante el año.
Decoración
Como se mencionaba anteriormente, la Natale italiana comienza a brillar el día de la Inmaculada Concepción, con la decoración de las casas. Entre los adornos más comunes se encuentran el belén o pesebre y el árbol de Navidad.
La representación del nacimiento del niño Jesús es una de las tradiciones favoritas en el país vecino. Normalmente contiene figuras en miniaturas que simbolizan a los diferentes personajes del pasaje bíblico, así como casas, animales o paisajes. A esta narración puramente religiosa, hay quienes deciden sumarle personajes de la actualidad, sobre todo vecinos de Nápoles.
Asimismo, este día tan señalado en el calendario italiano, las familias también aprovechan para poner en sus casas el árbol de Navidad. Normalmente los italianos prefieren utilizar árboles perennes. No obstante, quienes no se pueden permitir un árbol vivo, optan por decorar uno de plástico -aunque no es lo más frecuente-.
Dos semanas de luz y alegría que finalizan tras el paso de la Befana. El 6 de enero es el día en el cual los italianos aprovechan para recoger sus adornos y regalos, y afrontar un año nuevo lleno de retos y propósitos
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