Dicen que las mejores fragancias vienen en frascos pequeños, y si hablamos de bebidas, entonces podemos referirnos a vasos de chupito. La cultura gastronómica italiana no se queda atrás y además de sus deliciosos platos y sus exquisitos productos, cuenta también con una amplia variedad de licores tradicionales que alegran el paladar de cualquiera.  Y si hay dos licores por excelencia que destacan en la cultura italiana estos son el limoncello y el amaro.  Te descubrimos todo lo que necesitas saber sobre ellos para que disfrutes mucho más de tu próximo sorbo de estas delicias.

El limoncello

Con más de un siglo de historia este licor nace en la región sureña de Campania.  Aunque existen muchas leyendas sobre su creación, la más extendida es que fue el producto estrella de un bar familiar con una producción propia de limones y fueron los propios dueños quienes registraron esta fórmula. La obtención de esta bebida nace de la maceración en alcohol de corteza de limón y al que se le añade una mezcla de agua y azúcar.  Aunque su fama y su consumo se extiende por toda Italia son en las zonas de Sorrento, Capri, Procida y la costa Amalfitana. 

En la actualidad este licor es muy común que se sirva después de las comidas a modo de digestivo y generalmente se sirve con un cubito de hielo o en un recipiente congelado para que esté lo más frío posible.  También se suele añadir a algunos platos de repostería, especialmente en las pastas para darle un toque de sabor. En Just Italia contamos con el delicioso Limoncello Villa Saporelli, ideal para degustar en nuestra Trattoria o para llevártelo a casa desde nuestro Mercado Gourmet.  

Viendo el éxito de esta bebida, son muchas otras las que han surgido basándose en la maceración en alcohol de algún tipo de fruta. Una de las más famosas es el meloncello, característico de la zona de Sorrento y fabricada a través de un licor de infusión de leche y melón en alcohol. Esta bebida se utiliza también como dulce y sirve como una excelente base en muchos cócteles. 

Licor Amaro 

Es sin duda uno de los grandes éxitos de la licorería italiana. Aunque en la actualidad se consume como un producto de alimentación, su origen está en las boticas y monasterios del siglo XIX donde se comenzaron a crear con intención medicinal. Se trata de un licor de sabor agridulce y con una gran intensidad. Para su elaboración basta con la maceración de una mezcla de  hierbas, raíces, cortezas de cítricos y flores sobre alcohol puro o vinos y añadiendoles posteriormente almíbar.  

En cuanto a su consumo, el amaro se puede tomar como  un digestivo después de las comidas y cenas, solo, con hielo y en ocasiones acompañado por una rodaja de algún cítrico. Pero también es muy común emplearlo como mezcla  para otras bebidas como pueden ser cafés o cócteles. Siempre procurando que se mantengan en una temperatura relativamente fría. 

Actualmente la producción de Amari (plural en italiano del amaro) se extiende por toda Italia predominando siempre el proceso artesanal. Es por ello que existe una amplia gama de este licor ya que todos ellos tienen ciertas variaciones sobre las características comunes de  sabor amargo, elaboración con hierbas y una graduación de al menos 15º de alcohol.  Algunos de los más reconocidos amaros tanto a nivel nacional como internacional son las siguientes: 

• Amaro Montenegro: Producido en la localidad de Bolonia desde 1885, esta bebida   utiliza en su proceso de elaboración 40 variedades diferentes  de hierbas, provenientes de 4 continentes. 
• Amaro Averna: Comercializado desde 1856, este licor proviene de los monjes  Benedictinos de la abadía del Santo Espíritu en Sicilia.  Aunque actualmente la empresa Averna pertenece a Campari, se sigue  utilizando la receta tradicional original 
• Amaro Lucano: Originario de la región de Basilicata. Esta bebida fue creada por un pastelero italiano utilizando para ella 30 hierbas diferentes
• Amaro Cynar: Desde la región de Véneto, al noreste del país, esta aperitivo destaca por utilizar, entre las 13 raíces y hierbas empleadas, la alcachofa
• Amaro Ramazzotti: Se trata de la casa de amaro más antigua, ya que nace en 1815 en la ciudad de Milán. Su producto estrella se fabrica con una mezcla de 33 plantas provenientes de todos los lugares del mundo  
• Amaro Del Capo: El vecchio amaro del capo es originario de la región de Calabria. Fruto de la mezcla de 29 hierbas de la zona, contiene un sabor con ligero recuerdo a regaliz y se recomienda mantener a -20ºC antes de consumir 

Amaretto

Aunque su nombre pueda confundirnos con los anteriores, poco tienen que ver. Esta bebida surge en 1515 en la región de Saronno y es reconocido como uno de los licores más afrodisíacos del mercado. En cuanto a sus características  destaca por su sabor dulce  y en su composición destaca el uso de huesos de albaricoque y de la almendra. 

Pero además de estas tres familias tan conocidas existen otros tipos de licores que tienen un gran reconocimiento tanto dentro de las fronteras italianas como fuera de ellas. Uno de ellos es la crema de Bayleys, utilizada por la gran mayoría como corrector dulce del café.  Por otro lado nos encontramos con  bebidas mucho más fuertes como la grappa, un aguardiente de orujo para el que se emplean las partes sólidas de la uva, muy difundido especialmente en la región del Veneto. 

También está el Vecchia Romagna un brandy con más de 200 años de historia con  sabor complejo, distinto y seco conseguido a partir de la destilación de la uva.  Y cuando hablamos de uva no podemos olvidarnos del Vin Santo, un vino dulce de postre  que tradicionalmente acompaña las galletas artesanales cantucci. Y como  no todo se trata de beber directamente, el elisir San Marzano Borsci, es el producto perfecto para realizar  helados, dulces, cafés, etc. Sabemos que tras leer estas líneas estás deseando probarlos. Puedes degustarlos en nuestra trattoria o comprarlos directamente en nuestro mercado gourmet y nuestra tienda online. Además podrás descubrir  muchos más licores italianos bajo pedido, escribiendo a infoyreservas@justitalia.es